Por Zuel.
El sonido de las vibrantes cuerdas del qanún eleva el espíritu de la bailarina a través del más sutil de los movimientos de la danza oriental: el shimmi.
El qanún, o kanun, es un instrumento de cuerda que desciende de las antiguas arpas egipcia y babilonia.
Es una especie de cítara o salterio con una caja de resonancia de forma trapezoidal y suele tener entre 72 y 90 cuerdas.
Desde el siglo X es un instrumento fundamental en la música árabe clásica y tradicional. De hecho, le es otorgado el segundo lugar en importancia después del instrumento rey, el laúd, aunque, en ocasiones, el qanún puede sustituir al laúd como instrumento principal de cuerda.
El qanún se coloca plano sobre las piernas del músico o sobre una mesilla especial y el músico lo toca utilizando los dedos y unos plectros fabricados de metal y hueso, o incluso de plástico en algunas versiones más modernas, que se colocan en ambos dedos índices. Su sonido es delicado, armonioso, inspirador y, parecido a lo que ocurre con el nay, tiene cierto efecto «mágico o encantador» sobre el alma de las personas.
Para las bailarinas de danza oriental el qanún tiene una importancia vital, no solo porque su sonido es muy sensitivo sino porque ayuda a la bailarina a interpretar la melodía con la vibración de su cuerpo.
Es muy habitual en los espectáculos de danza del vientre de las bailarinas árabes que en el repertorio se incluya un número de taksim (improvisación de cualquier instrumento melódico) en el que tanto el músico como la bailarina improvisan un solo de qanún.
Rara era la canción de la mítica cantante Om Kalthoum en la que el qanún no estaba presente. En la canción Lessa Faker, que actualmente es uno de los temas clásicos más elegidos por las bailarinas en sus repertorios desde que, en los años 80, Sohair Zaki se atrevió a bailarlo por primera vez, el qanún es el instrumento estrella y da mucho juego a la bailarina para danzar y emocionarse.
Aunque, más que emocionarse, la bailarina lo que hace es transformarse… Transformarse en un cuerpo etéreo que, junto con el mágico sonido del qanún, consigue detener el tiempo por unos instantes y sostener en sus manos la conciencia de quien mira.
En el vídeo podemos disfrutar de las virtuosas manos de Maya Youssef, una músico siria afincada actualmente en Dubai que se ha convertido en un referente de la música oriental actual.
2 Responses to “El delicado sonido del Qanún”
02/04/2012
Gemma«consigue detener el tiempo por unos instantes y sostener en sus manos la conciencia de quien mira» ….. me parece una manera magistralmente preciosa de definirlo. Tiemblan mis manos al escribir estas palabras…GRACIAS por acercarnos a los instrumentos de una manera tan poética y sublime. Tenia que gritarlo, no he podido resistir la tentación de comentarlo. Un abrazo desde Barcelona.
31/03/2012
TriniZuel, recuerdo que nos hablaste del kanun en uno de los Módulos de Formación Profesional. No te puedo agradecer con palabras tantos conocimientos y emociones compartidas… !Haces mágia…! El reportaje genial, me ha encantado!!!! Lo guardare con mis apuntes… FELICIDADES POR TUS HERMOSAS Y CONSTRUCTIVAS PALABRAS.