Por Daniel M. Jorba.
No todo en Bollywood es música y danza. Nos hemos sumergido en las profundidades de este colorido arte descubriendo el porqué de su éxito entre la población india. Si el éxito del Bollywood en occidente se debe, básicamente, al baile, en India no es exactamente igual.
Actualmente Hollywood es la industria cinematográfica más conocida mundialmente y la más capacitada para producir cualquier tipo de película. Pero esto no significa que sea la única y la mejor. Por suerte para muchos existen otras cinematografías que, aún siendo minoritarias, consiguen cautivar al espectador.
De todas ellas, quizá, Bollywood es la industria que más logros ha conseguido. Hoy en día la India alberga una de las cinematografías que más películas produce. Un dato que, sobre todo en occidente, parece pasar desapercibido. Pero las cosas están cambiando. Como se comenta en el libro El sueño de Bollywood, de Aruna Vasudev y Alberto Elena, “el cine indio no nos ha necesitado a nosotros, aburridos espectadores occidentales, pero ahora llega el momento en que nosotros sí lo necesitamos a él. Es la hora del encuentro, de correr el velo de los tópicos y acceder a un mundo donde el color saturado y la exaltación melódica no lo es todo”. Y cuánta razón tiene.
Por otra parte, estoy seguro de que si nos dedicamos una tarde a ir preguntando a la gente qué es lo que conoce de las películas de Bollywood, si las conoce, nos responderá: baile, baile y más baile. Y no le falta razón a esta respuesta, pero está claro que no lo es todo. Para cualquier espectador habitual de este tipo de películas la contestación se queda corta. El cine de Bollywood tiene detrás otras cosas. Estamos hablando de las tramas, de las fuertes historias de amor, de los vestuarios, de los paisajes y, por supuesto, como ya nos han contestado por la calle, del baile.
Para ir concretando el tema diré que el cine de Bollywood recoge una serie de elementos que suelen ser comunes a todas las películas. Me refiero a las tramas amorosas. Es evidente que la principal característica de esta industria es la música y los bellos danzares de los protagonistas, pero también hay que tener en cuenta las historias. En su mayoría se tratan de historias de amor que, a ojos de un occidental, pueden parecer absurdas. Por otro lado, para reafirmarme, y a diferencia del cine de Hollywood, nunca veremos en una película hindi un enorme dinosaurio pasearse por las transitadas calles de Delhi, o a un ovni salir de las entrañas del Taj Mahal. Simplemente veremos historias de amor en todas sus variedades. Algunas con final feliz, otras trágicas… pero historias de amor al fin y al cabo. Y todo tiene un porqué.
Recientemente he podido visitar el maravilloso y exótico país de la India e indagar sobre el tema.
¿Por qué estas historias de amor?
Lo que me ha quedado claro es que hasta que uno no ve y vive la realidad cotidiana de India no puede llegar a entender hasta qué punto este tipo de películas son tan importantes para su habitantes. Durante mi estancia pude compartir varios chai (bebida típica de la India que mezcla el té con especias y hierbas aromáticas) con dos jóvenes indios que parecían desnudarme con su profunda mirada. Nunca antes había podido ver tanta sinceridad y seriedad al hablar sobre el tema.
En un mundo donde todavía se llevan los matrimonios concertados (al menos en la zona que pude visitar) y donde las mujeres son repudiadas al separarse de sus maridos y no pueden volver a casarse porque ya no son “puras”, pude ver una clara respuesta. Pero antes de saber nada, y con mi chai en la mano, pregunté:
“¿Por qué os empeñáis en contar siempre historias de amor imposibles? Entiendo que el baile es un distintivo para vuestra industria. Pero podéis hacer lo mismo sin contar historias de amor tan rocambolescas. Hay otras cosas que se pueden contar”.
Después de mi pregunta se produjo un momento de silencio. Todos nos quedamos mirando un televisor que, por cosas del destino, estaba ofreciéndonos un fantástico número de baile de una pareja locamente enamorada. Al terminar, uno de los chicos me respondió:
“Nos refugiamos en estas películas. En ellas vemos una vía de escapatoria a la vida real. Nosotros no podemos tener ni vivir estas situaciones que nos representan. A no ser, claro, que tengas mucho dinero. Por lo general nosotros no podemos escoger tan fácilmente. Nuestros matrimonios no son libres… Yo he dejado de creer en el amor, pero por suerte, en estas películas veo una forma de seguir adelante. Con ellas puedo tener aquello que se me niega en la vida real”.
Después de esta respuesta lo vi claro. Igual que la industria de Hollywood produce películas para entretener a la población aburrida de su vida rutinaria, en Bollywood se producen películas para que sus espectadores puedan seguir adelante a la vez que para dibujar una amplia sonrisa en sus caras y llenarles de orgullo para cuando hablen de su cinematografía. Ahora sí, ha llegado el momento de correr el velo de los tópicos y acceder a un mundo donde el color saturado y la exaltación melódica no lo es todo.
En próximas publicaciones tendré el placer de analizar alguna de las películas de esta apasionante industria cinematográfica. De este modo podremos ver que en el cine de Bollywood no todo es baile, baile y más baile, aunque esto sea lo que más nos interese a nosotros.
Dil keegaharaeon se.
(Desde el fondo de mi corazón)
3 Responses to “Bollywood: Es la hora del encuentro…”
16/03/2017
Alejandro LaraHola!
Tengo una duda
Me gustaría saber de dónde sale la música de la India?
Es decir, desde el proceso de composición y arreglos hasta la interpretación
Me podrían ayudar? Muchas gracias. Es para un trabajo de la Universidad
Si tienen amigos o conocen a alguien de la India que sea arreglista, o trabaje con Bollywood por favor haganmelo saber. Gracias!
07/10/2011
Sultana¡¡Me ha encantado el artículo!! Y espero una segunda parte… tercera… cuarta… quinta… En fin, como a Scherezade contando uno de sus cuentos de las «Mil y una noches»… pero en esta ocasión, sus «Mil y un verdades…». En el fondo pareciera que es la eterna historia de dioses y diosas del cielo indio con correspondencias en cualquier parte del mundo. Ahora es que después de millones de años (luz) nos disponemos a interpretarlas. Lástima que con el afán de querer ser «dioses y diosas» controladores nos perdemos de vivir la esencia real de las relaciones, que no son más que diversos lenguajes del amor en diferentes contextos. ¿Es qué acaso el amor no es un arte? Deshojo la margarita esperando la segunda parte… Enhorabuena por esta preciocidad.
05/10/2011
GemmaSiempre me había intrigado saber si lo que se reflejaba en las películas de bollywood tenía algo de realidad. Con este precioso artículo he aclarado mis dudas. Me parece triste la situación que se vive hoy en día allí pero al mismo tiempo me parece precioso que a través de las películas ofrezcan rayitos de esperanza a las personas, que espero y deseo, que algún dia se hagan realidad. Me ha fascinado el artículo, felicidades al autor, y gracias a Añil por publicarlo.